Los proyectos de diseño gráfico son variables en cuanto a la complejidad del alcance y su duración. Abordan desde el desarrollo de piezas gráficas para promocionar algún suceso o producto que puede completarse en unos cuantos días por una sola persona, hasta el desarrollo de estrategias de imagen corporativa, productos audiovisuales o publicaciones, que requerirán de varios meses o años y un equipo de trabajo numeroso. (Chacón Cifuentes, 2016 p. 406).