Atribución-NoComercial-SinDerivadas 4.0 Internacional (CC BY-NC-ND 4.0)Raga Perlaza, Rubén DaríoMuñoz Ortiz, Eider Alberto2024-09-162024-09-162024https://repositorio.uniremington.edu.co/handle/123456789/4547La palabra ética proviene del griego “Ethos” que traduce “carácter”, y con ella viene la personalidad que se forja a través de los actos y hábitos dándole a al ser humano su equilibrio de vida con su actuar, bajo normas morales bien definidas. El comportamiento humano es tan impredecible, que es tan necesario crear patrones de comportamiento en nuestra Sociedad y así definir si nuestro proceder es justo o injusto, si está bien o está mal, aun sabiendo de los valores universales o principios que nos rigen cómo el respeto, la justicia, la honestidad, la libertad, la humildad, la gratitud y muchos otros valores esenciales que determinan la condición humana en su actuar dentro del entorno que se encuentre. Los principios fundamentales del contador público son esenciales para el ejercicio de su profesión, al igual que su fiel cumplimiento en la aplicación de los mismo y de la norma que lo rige, al no hacerlo esto se ve empañado y por ende sancionado de acuerdo a la ley. Los actos de corrupción son los malos hábitos que incurren el profesional en el desempeño de su función y el contador público no es ajeno a ciertas prácticas de corrupción que solo desdibujan la figura de un buen profesional y deja entre dicho su ética profesional en el ejercicio o aplicación.19 p.application/pdfspaDerechos Reservados - Corporación Universitaria Remington, 2024ÉticaÉtica profesionalSancionesÉtica financieraCorrupciónTrabajo de grado - Especializacióninfo:eu-repo/semantics/openAccesshttp://purl.org/coar/access_right/c_abf2Ética profesionalContadoresCompetitividad